Habrá quien prefiera otras estaciones (para gustos, los colores, claro), pero hay que reconocer, que el verano trae luz y color y dan más ganas de salir a la calle, ver a los amigos/as y parece que se tiene otra alegría. La luz del sol tiene cierta energía positiva!! Todo se ve más bonito, más claro y luminoso. Apetece comer al aire libre, alimentos frescos y vitaminados, por lo que, para mí, el verano también es salud. Mejora el estado de ánimo, nos fijamos más en los paisajes, en los atardeceres, en los amaneceres, nos mostramos más ligeros de ropa, más naturales; nos bronceamos, nos llenamos de luz, en definitiva!!!
Desde pequeñita, mi estación favorita es el verano. Campamentos, viajes largos, al extranjero o por nuestras playas y puertos; horchatas, helados, ensaladas, paellas, refrescos, tintos de verano...El verano es el lado dulce y amable de la VIDA. Es el recuerdo latente de que la vida es bella; de que aunque en ocasiones parezca que "nunca va a salir el sol", que cuesta ver más allá cuando las cosas se ponen feas, al final, todo vuelve a colocarse en su lugar y siempre, siempre, vuelve el sol a brillar con fuerza.
Si eres de los que no te gusta el verano, mucha calma y despacito y con buena letra. Porque todo pasa y todo llega, y si algo ha de ocurrir, ocurrirá de cualquier manera.
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