¡Calentando motores! #Diciembre #Esperanza #Navidad

Llevo varios días queriendo escribir algo sobre la esperanza, y no encuentro hueco apenas para ello. Sin embargo, no deja de rondarme la idea en la cabeza y no hago si no reflexionar al respecto. Esperanza...A catorce días de que se acabe el año, a nueve de Navidad, y a cuatro para que entremos en el invierno, es buen momento para reflexionar. Nos pasamos la vida esperando a que pase algo, un ascenso en el trabajo, acabar de pagar los préstamos personales o hipotecarios, que nos toque la lotería, o en el ámbito personal y algo más profundo, encontrar a ese gran amor que dure toda la vida, que se curen nuestros seres queridos cuando enferman, que tengamos salud, ser mejores cada día, ese viaje que soñamos, etc. Y no nos damos cuenta de todo lo que ocurre día a día, esas mil cosas, esos pequeños milagros que escondidos entre los acontecimientos cotidianos que ocurren a diario. Que dentro de nosotros, donde casi nunca buscamos, es justo donde está la más profunda dicha; las respuestas, la sabiduría, la luz...; el mayor de los tesoros, que es ser quien somos. Vivir con esperanza, es vivir con alegría, es caminar seguros y confiados en que conseguiremos alcanzar nuestro destino y llegaremos a la meta; vivir con esperanza es estar confiados. Es comprender que la meta no es un destino fijo, si no disfrutar del camino, con  tesón, valentía y entusiasmo . Es saber que se puede y que merece la pena  vivir con esperanza. Vivir con esperanza es vivir sin miedo. Es vivir amando.  Es decir "¡sí quiero!", es querernos y querer al prójimo tal como es; es aceptación y plenitud. Es vivir en el presente y es mirar al futuro y sentir paz. Es cuando miramos atrás y nos sentimos agradecidos y afortunados. Estos días quiero dejar más espacio para la esperanza, sin excusas, de corazón. Y aprovechar cada momento y cada oportunidad que la vida nos brinda para  seguir creciendo y abrirnos a los demás. Que lo que se siembra se recoge, lo que no se da se pierde, y lo que se desea y se sueña intensamente, tarde o temprano, si ha de ocurrir y si es para ti, ¡se hace realidad...! Solo hay que cerrar los ojos, respirar, sonreír, escuchar, creer y tener siempre confianza.